Según un investigador holandés de la Universidad de Wageningen, las selfies (sí, esas frecuentes fotos que nos tomamos todos los días solos o con amigos) podrían causar un grave desequilibrio sexual e incluso la falta total de dicha actividad. ¡Esa onda!
El académico Christyntjes Van Gallgher, junto con su equipo investigativo, estudió a 800 personas que se autoidentificaron como unos verdaderos “adictos a los autoretratos”. Bajo ese universo, identificaron que el 83% de los examinados tenían una actividad sexual de cero a baja.
Como todo estudio, este posee un margen de error, el que viene siendo un 3% aproximadamente. Es decir, califica como confiable.
¿Qué hago entonces si me tomo muchas fotos? Los expertos a cargo del trabajo recomiendan a estos adictos reducir su actividad en redes sociales en al menos un 50%, todo sea con tal de recuperar la producción normal de hormonas.