<

Shakira en la última jornada del mundial

La colombiana Shakira puso el sexy en la ceremonia previa a la final del Mundial de Alemania, y el tenor español Plácido Domingo aportó luego la emoción, en la pausa del partido entre Italia y Francia, en un Olympiastadion teñido de azul.


«Willkommen bei uns» -«Bienvenido entre nosotros»-, compuesta por su hijo, Plácido Domingo Jr., fue la pieza elegida por el tenor para transmitir al estadio, dominado por los azules respectivos de los «azzurri» y los «bleus», la idea de amistad unida al fútbol.


Acompañado por un coro de ambos sexos, a su espalda, y con un grupo de niños a sus pies, Domingo cantó, desde la impresionante escalinata de piedra del estadio, el valor de la amistad, idea que ha dominado el torneo, bajo el lema «El mundo, entre amigos».


La colombiana Shakira y el «rappero» Wycleaf Jean habían encendido previamente el ambiente de la final del Mundial entre las selecciones de Italia y Francia con la interpretación de su éxito musical del verano «Hips don’t lie» (Las caderas no mienten)


Vestida sensualmente de naranja, Shakira irrumpió diez minutos antes del partido en un blanco escenario de trazados futuristas localizado a un extremo del Olympiastadion de Berlín, en compañía de Wycleaf Jean y decenas de danzarines y músicos.


La acústica no favoreció a la joven de 29 años, pero el ritmo del espectáculo, de unos diez minutos, sirvió de mera antesala musical a lo que el graderío esperaba ver: fútbol.


Por las mismas, Domingo puso la emoción a una pausa a la que tanto «azzurri» como «bleus» asistían con el corazón en un puño, puesto que el marcador estaba en 1-1.


Contenido patrocinado

Contenido patrocinado