Sabemos que Katy Perry es conocida por sorprender cada vez que se sube al escenario, y esta vez no fue la excepción. Fue durante el festival brasileño Rock in Rio, en donde la cantante subió a una fanática al escenario para hablar con ella. Lo que no se percató es que la fan estaba muuuy borracha y drogada, lo que la puso en un par de momentos incómodos.  

Primero, tuvo dificultades para entender el nombre de la fan – Rayane-, seguido por una explosiva muestra de afecto de parte de la fan, la cual incluía besos en el cuello, en la mano, en la cara e incluso se atrevió a apoyar su cabeza en los pechos de Katy! Muy osada la chica. 

La cantante manejó la situación tratando de preguntarle por palabras en portugués, y al despedirla, quiso seguirle el juego dándole una palmada en el trasero.