La marca sueca Snask y la cervecería de PangPang tuvieron una idea increible: Crear la primera y única cerveza meticulosamente ideada para ser disfrutada en la ducha.
De composición pálida fuerte pero dulce, esta cerveza se prepara a mano en el sur de Estocolmo y viene en una botella de 180 ml, osea, la mitad del tamaño de una lata. Una porción intencionalmente pequeña que asegura que la cerveza será usada antes de que tenga la oportunidad de calentarse.
Fredrik Öst, de Snask, eclaró: «Tomamos la decisión de mezclar dos ideas y crear una cerveza de ducha que está destinada a ser bebida en tres o cuatro bocados mientras te bañas»,
¿Qué tal? ¡Hay que probarla!
