Siguen apareciendo las bizarras historias de San Valentín, y esta vez el Bangkok Post trae una muy singular.
Porque en Tailandia fue sorprendido un monje budista de 35 años, teniendo sexo y consumiendo drogas en un motel con una joven de 19, celebrando el Día de los enamorados.
La feliz pareja fue descubierta arriba de la pelota en una redada realizada por la policía en el motel, que justo andaba buscando indicios de «conductas impropias».
Y lo que los delató, fue que al mirar para adentro del auto del monje, vieron su manto azafrán y su bolsa de monje, lo que les llevó a pensar «aquí pica la jaiba».
Finalmente la pareja fue detenida por porte y consumo de metanfetaminas, y el monje fue expulsado de la orden religiosa a la que pertenecía, para mandar un claro mensaje a todos los monjes en el mundo. Una noticia que nos deja así:
