Tener hermanos es una de las cosas más bacanes del mundo mundial, porque hay que decirlo: Crecer con alguien con quien pelear, aprender a compartir, ser cómplices y sentirse siempre acompañado, es muy entretenido.
Y la ciencia lo confirma.
Un nuevo estudio de las Universidades de Montfont y Ulster descubrió que tener un hermano nos hace más felices y optimistas… sobre todo si son hermanas.
De hecho, la investigación demostró que las hermanas ayudan a sus hermanos a ser más abiertos y comunicativos sobre sus sentimientos, lo que mejora la salud mental. Como si eso fuera poco, otro estudio descubrió que tener hermanos nos hace más amables.
Buenísimo ¿no?