Una nueva tendencia se tomó las redes sociales y tiene como protagonista a nuestros amigos felinos. Catzilla es la moda de fotografiar a los gatos, creándole cortes que los hagan ver como un dinosaurio, utilizando el hashtag #Dinocut.

Lo negativo de esta práctica es que, los dueños deben rasurar el pelo de su mascota, creando diseños que hagan que se parezca lo más posible al reptil. La idea es ser lo más creativo posible, pero hacerle estos looks puede tener consecuencias importantes para el felino.

Sin embargo y según el sitio Infobae, el pelo del gato cumple la función de protegerlo de agresiones externas, como los golpes, el frío y la radiación solar, además de ser una defensa contra la deshidratación.