“Aveners: Endgame” fue uno de los estrenos más esperados del año y tiene a todos comentando la película que pone fin a más de una década de exitosas producciones de Marvel.

Uno de los protagonistas indiscutidos de esta saga es Iron-Man, personaje caracterizado por Robert Downey Jr. y quien vio un renacer de su carrera gracias al superhéroe creado por Stan Lee.

De hecho, el actor de 54 años vio también como su cuenta bancaria se iba llenando con millones de dólares. El salto de Downey Jr. fue tal que durante estos diez años, desde que se puso por primera vez la armadura de metal en 2008, su sueldo se multiplicó 150 veces… una cosita poca, ¿no?

Esto porque en 2008, Downey Jr. era visto como un “chico malo” de Hollywood. Debido a sus adiciones con las drogas y problemas con la ley que lo tuvieron en más de una ocasión tras las rejas, pocos querían trabajar con él. Es más, esto lo hizo ser parte de una notable escena de Los Simpson que daban cátedra sobre dicho problema.

Esto porque la cinta recaudó 585 millones de dólares, un auspicioso comienzo que daba el espacio y la tranquilidad para seguir explotando la veta de los superhéroes de Stan Lee.

Y Downey Jr. al parecer entendió la fuerza que tenía el personaje de Tony Stark, ya que sin él, las demás historias inevitablemente perderían fuerza. Por ello es que negoció un acuerdo financiero que ya se lo quisiera cualquier actor.

Es así como el actor llegó a ganar 75 millones por su participación en Avengers: Infinity War, una cifra muy superior a los 20 millones en promedio que ganaron sus compañeros de elenco, según ha informado The Hollywood Reporter.

El éxito profesional y financiero de Downey Jr. fue tal que encabezó la lista de Forbes de los actores mejor pagados de Hollywood entre junio de 2012 y junio de 20131 y junio 2015 a 2016.