El último episodio de “Game of Thrones” no sólo tuvo críticas positivas por lo extremadamente épico que resultó ser, sino que también comentarios negativos por lo oscuro que se veía, lo que en muchas oportunidades lo hacía poco entendible, visualmente hablando.
Es por esto que Fabian Wagner, director de fotografía del capítulo, conversó con TMZ asegurando que los mismos creadores de la serie querían que la Batalla por Winterfell fuera lo más oscura posible, ya que buscaban, entre otras cosas, que lo viéramos en una habitación sin luz.
Además, contó algunas escenas no se vieron en óptimas condiciones debido a la compresión que le dio HBO a la transmisión del domingo, la que ocasionó una “calidad visual más pobre”. “Esto empeora si se ve en un servicio de transmisión con una conexión débil o en una habitación demasiado brillante”, comentó.
Junto con esto, Wagner también argumentó que esta estética negra del tercer episodio de la octava y última temporada de “Game of Thrones” tenía como misión transmitir caos e intensidad, tal como si nosotros estuviéramos en el campo de batalla del pueblo del norte. “Intentamos darle a los espectadores un episodio divertido de ver”, concluyó.