Una gran sorpresa se llevó la investigadora y profesora de buceo Ocean Ramsey, cuando se dio cuenta de que los tiburones tigre que monitoreaba en una isla en Hawái, huyeron sin motivo aparente. Ramsey se encontraba en su barco de buceo mientras estudiaba el comportamiento de dichos animales, mientras se comían los restos de un cachalote en estado de descomposición.

De manera inesperada, la investigadora notó que algo comenzó a rozar su bote y al revisar, pasó del susto al asombro: Se trataba de Deep Blue, un tiburón blanco hembra de casi siete metros de largo, conocida por su cercanía con los humanos y que había sido vista por última vez en 2013 en la isla Guadalupe, en México.

Tras conocerse la noticia, los estudiosos de los tiburones se emocionaron por la reaparición el animal, valorado como el tiburón blanco más grande del que se tenga registro hasta ahora.

Los investigadores especulan sobre el regreso del vertebrado, sin embargo, suponen que Deep Blue llegó a las aguas de Hawái por «necesidad de nutrientes ante la sospecha de que está embarazada. La escoltaban dos delfines que jugaban con ella en la profundidad del mar”, reseñó el sitio Star Advertiser.

Luego de comer, Deep Blue no tuvo problemas en nadar libremente junto con Ramsey y mostrar la gentileza que la caracteriza en cada aparición.