El proceso iniciado por la cantante Britney Spears para librarse del control a través de una tutela legal por parte de su padre, Jamie Spears, continúa.
El pasado lunes, la popular artista sufrió un pequeño traspié judicial, después de que la jueza Brenda Penny, quien supervisa el caso, le negara la petición para adelantar la audiencia en la que se debatirá la permanencia de su padre como tutor.
Un juicio social
Las redes sociales, concretamente Instagram, han sido un refugio para la cantante Britney Spears durante todo este proceso judicial contra su padre.
A comienzos del verano, Spears utilizó ese canal de comunicación para sincerarse con sus seguidores y pedir disculpas a su comunidad en Instagram por «fingir que había estado bien durante los últimos dos años».
Asimismo, expresó que «aparentar» le había servido de ayuda y que la red social había sido parte de esa “cura”. Lo que, en sus palabras, representa «una plataforma genial para compartir mi presencia, mi existencia y sentir que importo a pesar de lo que está pasando».
Por ello, paralelamente al proceso judicial la cantante ha seguido activa en Instagram compartiendo su vida personal, llegando incluso a contar recientemente que pasar tiempo con caballos unos días a la semana le ayuda a aliviar su ansiedad social.
El consejo de Brian
Uno de los que han querido enviar una advertencia a Britney ha sido Brian Littrell, cantante de los Backstreet Boys, quien le recomienda que “deje de hacer lo que hace”, como posar semidesnuda, porque “no le viene bien”.
Así lo ha asegurado en unas declaraciones al portal TMZ, donde se muestra tajante con la nueva actitud de la artista, diciendo que a Britney «la observan como si estuviera bajo un microscopio. Tiene que ser cuidadosa, es madre y está en una situación particular, que quizá haya pasado antes, pero es algo que no ocurre todos los días».
«Tiene que ser inteligente, aunque no es que tenga que parar de postear en las redes sociales sobre su vida. Ella hace lo que hace, es Britney Spears», señaló Brian.
El cantante de 46 años, parecía referirse al contenido algo subido de tono de las últimas publicaciones de Britney, pero también al número de publicaciones que la artista comparte con detalles de su vida cotidiana, que podrían ser usados en su contra.
