Como sabemos, Demi Lovato tuvo que ingresar a rehabilitación por su consumo de drogas y sus trastornos alimenticios durante el 2010. Pero es ahora cuando Demi logra confesar lo que realmente vivió durante ese período.

Durante esos días, ella misma calificó que era “una pesadilla” trabajar a su lado, por sus actitudes y porque “no podía estar una hora sin consumir cocaína”. Decidió entrar a rehabilitación cuando golpeó a un bailarín. 

“Les decía, ‘traten de castigarme… yo pago sus cuentas’”, recordó, agregando que “antes de volver a estar sobria, yo era una de esas personas que dicen ‘me importa una mierda, da igual’. Y usaba eso como una excusa para hacer lo que quería. Era una pesadilla para trabajar”.

Demi también sufrío de trastorno bipolar. “Tuve que aprender la manera dura que ya no puedo ir a fiestas. Algunas personas pueden salir y no ser gatillada, pero ese no es mi caso”, señaló.

“Sé que mi vida suena aburrida, pero llegué a un lugar donde prefiero estar relajada que tener que arreglarme para ir a alguna fiesta o bar con gente que en realidad no se preocupa de mi bienestar”, afirmó. La cantante ahora tiene una relación estable con el actor Wilmer Valderrama. 

“Todavía tengo cosas que demostrar –no sólo acerca de las cosas que puedo hacer con mi voz”, indicó, para luego finalizar señalando que “algunas personas piensan que porque soy joven no puedo mantenerme sobria. Pero esas son cosas que quiero probarme a mi misma”.