Rodrigo Rojas Vade declara como imputado por perjurio ante la PDI
El exvicepresidente de la Convención Constitucional es investigado por inconsistencias en su declaración de patrimonio e intereses.
El convencional Rodrigo Rojas Vade, declaró este 16 de septiembre como imputado ante la Policía de Investigaciones (PDI) en la comuna de Independencia.
Esto luego de una querella presentada por la Mesa Directiva de la Convención Constitucional, puesto que el constituyente incluyó en su declaración de patrimonio una deuda por 27 millones con el Banco Scotiabank para financiar un «tratamiento quimioterapéutico contra el cáncer».
Y tras reconocer que no sufre de cáncer, la Fiscalía Centro Norte abrió una causa por el posible delito de perjurio.
¿Qué dijo su defensa?
Su abogado, Tomás Ramírez, señaló que Rojas Vade «se va a referir a los hechos de la investigación, va a entregar una parte de los antecedentes, los otros antecedentes los va a entregar directamente a la Fiscalía y, por lo tanto, es un paso muy importante en la investigación para que se aclaren todos los detalles«.
La investigación en contra del convencional es liderada por el fiscal centro norte, Patricio Cooper, tras la presentación de antecedentes hecha por la mesa de la Convención Constitucional.
El diagnóstico de Rojas Vade
La defensa del exvicepresidente de la Convención Constitucional habló con La Red. Allí especificó que su primer diagnóstico médico apareció en marzo de 2013. Donde se le detectó sífilis, afección que guardó en silencio durante casi 10 años, producto del estigma social que existe sobre las enfermedades de transmisión sexual.
«Él tuvo un diagnóstico de la bacteria que se llama treponema pallidum, que es la que genera la sífilis. Ahora, la sífilis es una enfermedad que es tratable. Penisilina, cierto. No pareciera tener una proyección, pero sí tiene un estigma social», señaló Ramírez.
En ese contexto es que Rojas Vade habría comenzado con su relato sobre padecer cáncer. Sin embargo, con el correr de los años fueron apareciendo nuevas afecciones que lo habrían hecho mantener su discurso al respecto.
Así, se le diagnosticó la poco frecuente enfermedad de Behcet, que genera inflamación de los vasos sanguíneos. Y junto con esa patología, se le desarrolló otra que provoca que el sistema inmune destruya las plaquetas, llamada púrpura trombocitopénica inmune.
