¡A la hoguera! Ahí terminaron los libros de la saga de “Harry Potter” durante esta semana después de que un párroco de Estados Unidos decidiera quemarlos por “ser brujería”.
El evento que fue transmitido en Facebook se da en medio de la polémica censura que viven diferentes libros en varias partes del país.
La hoguera que quemó a Harry Potter
La masiva quema de libros ocurrió la noche del miércoles 2 de febrero en el Nashville, estado de Tennessee, a manos de el pastor Greg Locke, líder de la Global Vision Bible Church. Esto como una forma de “liberación de demonios”.
«Somos plenamente conscientes de hacia dónde vamos. Traigan todo. Dejen de permitir que las influencias demoníacas entren en su casa (…) Es cien por cien brujería», señaló Locke en una publicación de su Instagram.
Además de solicitar los libros de “Harry Potter”, el pastor dijo que los asistentes llevarán todas las películas y novelas de “Crepúsculo”, debido a que están “llenos de hechizos, demonismo, cambios de forma y ocultismo”
“Trae cartas del tarot, pájaros Ouija, cristales curativos, estatuas de ídolos, libros de hechizos y todo lo relacionado con el ocultismo. NO TOLERAREMOS la brujería y no nos comprometeremos con los adoradores del diablo”, continúo en su comunicado.
Book burning at a church in Tennessee. Pastor Greg Locke. Scary stuff. pic.twitter.com/Tu4trVDSrX
— oliver (@omw) February 3, 2022
En redes sociales se compartieron los videos del momento en que la gente rodea una enorme fogata y lanzan desde los libros de J.K. Rowling, objetos de la saga de vampiros y más como forma de combatir las «influencias demoníacas».
La censura más allá de la brujería
Esta no es la primera vez que el famoso mago se ve en problemas con la comunidad cristiana. En abril de 2019, un sacerdote del norte de Polonia dirigió una quema pública de las novelas y otros artículos “malvados”. No obstante, el padre Rafał Jarosiewicz se disculpó posteriormente.
Por otra parte, el reciente evento del párroco Locke se produce en medio de las crecientes críticas en lugares de Estados Unidos contra ciertos libros, con peticiones para prohibir la enseñanza de algunos de ellos en las escuelas por motivos políticos o religiosos.
A finales de enero, el condado de McMinn (Tennessee) censuró «Maus», un famoso cómic educativo y ganador del premio Pulitzer sobre el Holocausto, debido a sus imágenes de cuerpos desnudos y uso de blasfemias contra Dios.
Para su tranquilidad, aclaramos que la brujería de Harry Potter es netamente ficción.
