En noviembre Taylor Swift se presentará en Buenos Aires, Argentina, y ya hay fans esperándola afuera del estadio River Plate que se instalaron allí apenas compraron las entradas.

Sin embargo, estar en las afueras de donde será el show tanto tiempo antes no es tarea fácil. Sino que requiere mucha organización con grupos de WhatsApp, un Excel con los horarios y mucho tiempo.

La estricta organización que siguen los fans de Harry Styles

Harry Styles se presentó hace poco en la ciudad de Barcelona, en España, y sus seguidores llegaron al recinto con cinco semanas de anticipación.

Así lo reveló Marta a Infobae, cuyo grupo de Whatsapp para esperar el concierto fuera del lugar consiste en 30 personas, quienes se tienen que turnar con horarios estrictos.

De hecho, de acuerdo a las horas que se cumplan acampando fuera del recinto, es que se determina después el orden de entrada en el concierto. ¿Cómo lo hacen? Pues a través del Excel donde llevan la cuenta del tiempo que cada uno cumple.

Pero los horarios no valen lo mismo, de acuerdo al medio citado. Por una parte, la noche suele contar el doble y hay que haber cumplido con un mínimo de horas para seguir en el grupo.

Por otra parte, si una persona se anota en el Excel y no llega hasta el lugar para esperar, la penalizan. Pero todas estas reglas, que de seguro tienen los fans de Taylor Swift en Argentina, cambian en cada grupo de fans que se organizan.

Las críticas y problemas que enfrentan los más fanáticos

Algo que puede suceder en medio de la espera en un concierto, es que esté programado otro gran show. Y esto mismo fue lo que pasó en el caso de Harry Styles en Barcelona, que mientras sus fans esperaban, ellos se encontraron con las personas que iban a ver a Beyoncé.

Ante esto, la seguridad del recinto les pidió que se fueran, pero los seguidores del ex One Direction no querían por miedo a perder su lugar. Sin embargo, les dijeron que ya los conocían y que no iban a dejar a otros colarse, por lo que luego regresaron cuando se terminó el espectáculo de la cantante.

Pero ese no es el único problema, pues Marta le confiesa a Infobae que pasó miedo. «Nos insultaba gente que conocemos de otros conciertos y fueron muy agresivos -ha explicado-, incluso difundieron el número de teléfono de una de las que estábamos haciendo cola y empezaron a amenazarla directamente a su móvil», reveló.

«Nos criticaban porque decían que ellos trabajaban y no podía venir -dice una amiga de Marta-, pero no es verdad, yo trabajo de monitora y he podido hacer mis horas de cola, incluso tengo amigas que viven en Mallorca y en Málaga que han venido varios fines de semana antes de concierto para hacer sus horas y han podido estar en las primera filas”.

Sin embargo, otra fan de Harry Styles dice que vale la pena, ya que «es la única manera de verlo bien porque si estás un poco atrás te tapa la gente cuando levanta los móviles».