Un estudio realizado por la Universidad de Granada analizó las boletas que entregan supermercados y otros comercios establecidos, encontrando sustancias toxicas nocivas para la salud.

La publicación se hizo en la revista “Environmental Research”, donde los expertos explican que analizaron la presencia de bisfenol-A (BPA) como de bisfenol-S (BPS) en un centenar de recibos de Brasil, España y Francia.

Según las conclusiones del estudio, nueve de cada 10 boletas que se entregan en las tiendas contiene bisfenol-A.

“El BPA es ese polvo blanco que desprende cuando lo sacas del monedero y que mancha los dedos», dijo Nicolás Olea, profesor de Medicina de la Universidad de Granada

La presencia de estas sustancias estaría relacionada con el cáncer y la infertilidad, así lo explicó Olea: «Podemos reconocer este tipo de papel porque si acercamos una fuente de calor, por ejemplo un fósforo, se ennegrece de forma instantánea. Esta sustancia, que hace que la tinta se borre con el tiempo, es un conocido disruptor endocrino que altera el equilibrio hormonal de las personas expuestas, generando enfermedades como malformaciones genitourinarias, infertilidad, obesidad y cáncer en órganos dependientes de las hormonas, como el de mama”.

Los expertos aseguraron que para el usuario común no representa un riesgo como para las personas que trabajan con el material, como los cajeros de las tiendas. No obstante, recomendaron mejorar los sistemas de vigilancia de toxicidad de compuestos químicos, así como también disminuir la manipulación de las boletas y el contacto de éstas con la comida.