El Gobierno aborigen de Anangu Pitjantjatjara Yankunytjatjara (APY) en el sur de Australia anunció que aprobaron la matanza de 10 mil camellos por poner en riesgo a la comunidad y causar estragos en su desesperada búsqueda de agua en plena sequía que afecta al país por ola de calor e inmensos incendios forestales. Esto será llevado a cabo por cazadores y les dispararán desde helicópteros.

«Hemos quedado atrapados en condiciones apestosas e incómodas, sintiéndonos mal, porque los camellos están entrando y derribando cercas, entrando a las casas y tratando de llegar al agua a través de sistemas de aire acondicionado», sostuvo al respecto la miembro de la comunidad de APY, Marita Baker, al medio local The Australian.

Un portavoz del Departamento de Medio Ambiente y Aguas señaló al portal australiano News que «durante muchos años, los propietarios tradicionales en el oeste de APY Lands han reunido camellos salvajes para la venta, pero esto no ha sido capaz de gestionar la escala y la cantidad de camellos que se congregan en condiciones secas».

Además de comentar que esta situación conlleva a daños significativos a la infraestructura, peligro para las familias y problemas críticos de bienestar animal, ya que algunos camellos mueren de sed o se pisotean entre sí para acceder al agua.

De acuerdo al comunicado de APY, cazadores dispararán este miércoles a los camellos desde helicópteros. Se estima que esta operación se prolongará por cinco días.